La gestión y el análisis de riesgos es fundamental en el ámbito de la ciberseguridad. Medir el riesgo no solo es crucial para identificar posibles amenazas, sino también para implementar estrategias efectivas de mitigación y protección.
La medición del riesgo aporta una serie de beneficios fundamentales para tu empresa y sus clientes:
- Identificación proactiva de amenazas: Al medir el riesgo, tu empresa puede anticiparse a posibles vulnerabilidades y amenazas cibernéticas, lo que permite una respuesta más ágil y efectiva ante potenciales incidentes de seguridad.
- Optimización de recursos: Mediante un análisis exhaustivo del riesgo, podemos asignar sus recursos de manera más eficiente, enfocándolos en las áreas más críticas y vulnerables de la infraestructura de sus clientes, maximizando así la protección y minimizando los costos asociados.
- Mejora continua: La medición constante del riesgo nos permite a identificar áreas de mejora y evolucionar sus estrategias de seguridad de forma continua, adaptándose proactivamente a un entorno cibernético en constante cambio y fortaleciendo la resistencia ante futuros ataques.
Consecuencias
La falta de medición del riesgo puede acarrear serias consecuencias:
- Exposición a amenazas no detectadas: La ausencia de una evaluación adecuada del riesgo deja a tu empresa y a sus clientes vulnerables a amenazas cibernéticas no identificadas, aumentando el riesgo de brechas de seguridad y la pérdida de datos sensibles.
- Respuestas ineficaces ante incidentes: Sin un análisis previo del riesgo, tu empresa podría enfrentarse a incidentes de seguridad sin contar con un plan de acción adecuado, lo que dificulta una respuesta rápida y eficiente, prolongando así la duración y el impacto del incidente.
- Impacto en la reputación: La incapacidad para medir y gestionar correctamente el riesgo puede afectar la reputación de tu empresa y la confianza de sus clientes, lo que podría traducirse en pérdida de contratos, demandas legales y daños irreparables a la imagen de la empresa.
- Mayor exposición a los errores humanos: La intervención humana en los procesos informáticos siempre está expuesta a que se cometan errores (intencionados o no intencionados). Por ejemplo, un empleado sin los conocimientos suficientes, o con privilegios superiores a los de su función, puede realizar acciones que comprometan los datos o produzcan un malfuncionamiento en los sistemas.
Factores clave para medir el riesgo
- Evaluación de vulnerabilidades: Identificar y analizar las vulnerabilidades en la infraestructura y los sistemas de tus clientes.
- Análisis de impacto: Evaluar el impacto potencial que tendrían las amenazas identificadas en la operación y los activos de los clientes.
- Tendencias del cibercrimen: Estar al tanto de las tendencias y evoluciones en el panorama del cibercrimen para anticipar nuevas amenazas y vulnerabilidades.
- Cumplimiento normativo: Garantizar el cumplimiento de las regulaciones y estándares de seguridad aplicables a las operaciones de Widefense y sus clientes.
Cómo medir el riesgo en ciberseguridad
La capacidad de medir el riesgo con precisión es esencial para garantizar la efectividad de las estrategias de ciberseguridad de tu empresa y proporcionar un nivel óptimo de protección para sus clientes. En este sentido, el diagnóstico juega un papel crucial al ofrecer una evaluación exhaustiva de la postura de seguridad de los sistemas y redes de los clientes.
El diagnóstico de seguridad cibernética proporciona una serie de factores esenciales para medir el riesgo de manera completa y efectiva. Estos factores no solo complementan el análisis proporcionado por WSC, sino que también sirven como pilares fundamentales en la evaluación de la seguridad cibernética.
Diagnóstico de ciberseguridad como punto de partida para otras estrategias
Mapa de riesgos de ciberseguridad
Propósito: Obtener una visión del estado de control de la organización frente a diversos tipos de ciberataques que puedan afectar a los sistemas de información. Se empleará una metodología que valore la efectividad de los controles. Para situaciones donde la protección contra ciberataques no sea la óptima, se diseñará un plan de tratamiento con acciones específicas para reducir el riesgo.
Resultado: Actualización del mapa de riesgos de ciberseguridad, destacando las vulnerabilidades de la organización ante posibles amenazas y ciberataques.
Auditoría de gestión de ciberseguridad
Propósito: Realizar una auditoría completa de la gestión de ciberseguridad en la empresa. Se evaluará la efectividad de los controles de seguridad implementados. Se revisarán controles organizativos, de gestión, técnicos, tecnológicos y de continuidad de negocio. Se proporcionará un informe con hallazgos clasificados por gravedad para priorizar su corrección.
Resultado: Evaluación de los controles de seguridad implementados en la organización, con sus vulnerabilidades clasificadas según su importancia.
Plan de ciberseguridad
Propósito:
Realizar una revisión exhaustiva de la situación actual de la organización en materia de ciberseguridad, evaluando la efectividad de los controles existentes y detectando posibles vulnerabilidades. Se elaborará un informe que refleje el estado actual y se diseñará un plan director con los proyectos necesarios, ordenados por prioridad, para mejorar la gestión de la ciberseguridad según las necesidades y recursos de la empresa.
Resultado:
Plan de acción con los proyectos de seguridad a implementar por la organización para abordar las deficiencias de seguridad identificadas.
Implantación de un Sistema de Gestión de Seguridad de la Información (SGSI):
Propósito: Basándonos en la norma ISO 27001 o en el Esquema Nacional de Seguridad, llevaremos a cabo la implementación del SGSI que cumpla con todos los requisitos de la normativa correspondiente. Esto proporcionará a la organización un sistema de gestión que incluya políticas y directrices de seguridad, análisis de riesgos de seguridad y gestión de los controles de seguridad, todo ello dentro de un ciclo de mejora continua.