En el mundo de la ciberseguridad, la lucha contra el ransomware (anti-ransomware) se refiere a las estrategias y herramientas empleadas para defenderse de los ataques de ransomware. El ransomware es un tipo de malware que cifra los archivos de la víctima, dejándolos inaccesibles. Luego, los hackers exigen un pago de rescate a cambio de una clave de descifrado. Las soluciones anti-ransomware adoptan un enfoque multicapa para combatir esta amenaza:

Prevención:

• Monitoreo basado en el comportamiento: Esta tecnología analiza las aplicaciones en busca de comportamientos sospechosos que podrían indicar que un ransomware intenta cifrar datos.
• Control de aplicaciones: Esta función restringe la ejecución de programas no autorizados, lo que potencialmente detiene el ransomware antes de que se active.
• Copias de seguridad: Mantener copias de seguridad periódicas y actualizadas permite una restauración rápida de los datos en caso de un ataque, eliminando la necesidad de pagar el rescate.
• Gestión de parches: Mantener el software y los sistemas operativos actualizados con los últimos parches de seguridad cierra las vulnerabilidades que el ransomware podría aprovechar.